Nutrición y cirugía de la obesidad
Las recomendaciones nutricionales en pacientes postoperados de cirugía bariátrica pueden variar según el tipo de intervención practicada, bien sea una técnica restrictiva como la gastrectomía vertical o una técnica mixta tipo bypass gástrico o una cirugía malabsortiva como una derivación biliopancreática o un SADI’s.
Tipos de cirugía de la obesidad
Consideramos fundamental adaptar el tipo de intervención a las características del paciente para conseguir los resultados en la pérdida de peso y la mejora de las comorbilidades presentes.
Los tipos de cirugías de la obesidad pueden dividirse en:
Técnicas restrictivas.
1. Intervenciones restrictivas.
- Se incluye la banda gástrica ajustable donde el reservorio gástrico suele ser de capacidad muy reducida (25 ml de promedio), técnica actualmente en desuso.
- La gastrectomía vertical o manga gástrica, con una reducción de la capacidad gástrica. En estos casos es importante la disminución del volumen gástrico a la ingesta por toma, con un reservorio gástrico algo mayor en la gastrectomía vertical (80-150 ml), aunque al principio de la cirugía la toma de alimentos esta limitado a la mitad de su capacidad aproximadamente.
En este tipo de cirugías se preserva la funcionalidad del tracto gastrointestinal, por lo que la atención debe centrarse en adecuar una ingestión alimentaria muy restrictiva, pero con el aporte suficiente de proteínas y micronutrientes para evitar deficiencias.
Técnicas mixtas.
El bypass gástrico es una técnica de cirugía produce una restricción a la ingesta de alimentos al disminuir el volumen del estómago y la unión de este reservorio gástrico a un segmento del intestino delgado altera el tránsito del alimento y la digestión de la comida.
En el bypass puede ser necesaria la suplementación de vitaminas y micronutrientes. Es recomendable los controles analíticos periódicos y un seguimiento clínico a largo plazo para poder incorporar los nutrientes necesarios.
Técnicas malabsortivas.
2. Intervenciones malabsortivas. Los pacientes tienen menos limitaciones a la hora de ingerir alimentos porque se dispone de una mayor capacidad gástrica (150-250 ml) pero, debido a los largos cortocircuitos intestinales, es frecuente que existan problemas con la absorción, especialmente de las grasas, por lo que cuánto más rica en grasa sea la dieta, mayor será el número de deposiciones en forma de esteatorrea que pueden ocasionar molestias personales debido al pH ácido de sus heces. representadas por las derivaciones biliopancreáticas:
- La derivación de Scopinaro. consiste en la realización de una gastrectomía distal dejando un remante gástrico entre 200 y 500 ml dependiendo del exceso de peso del individuo. Sucesivamente se realiza una sección ileal a 300 cm de la válvula ileocecal que se anastomosa este asa al remanente gástrico confeccionando un asa común de 50-80 cm.
- Cruce duodenal. Se confecciona una gastrectomía vertical preservando así la función pilórica. La parte de la derivación bilio-pancreática distal, excluyendo la mitad proximal del intestino delgado, incluye un asa común de 75 a 100 cm desde la válvula ileocecal y el asa alimentaria de 250 cm.
- Bypass duodenoileal con gastrectomia vertical (SADI’s). Consiste en realizar una gastrectomia vertical y una única anastomosis duodenoileal dejando un canal común de 250cm en los actuales.
En estos casos, al alterarse la anatomía del tubo digestivo y los tramos de absorción, tanto a nivel proximal (duodeno, yeyuno) como distal (yeyuno e íleon terminal), nuestra atención debe centrarse en el aporte fundamentalmente de proteínas, así como de ciertos minerales (hierro, calcio, zinc), vitamina B12 y vitaminas liposolubles evitando en lo posible la ingesta de grasas para contener la malabsorción y evitar la pérdida de micronutrientes.
Cada cirugía requiere unas recomendaciones nutricionales específicas. La importancia de la toma de suplementos vitamínicos y el asesoramiento nutricional en centros especializados es fundamental para obtener los resultados de pérdida de peso esperados.