La cirugía laparoscópica, es bien tolerada, en mayoría de los casos, no hay ningún síntoma. Una vez que se toleran los líquidos, los pacientes abandonan el hospital en uno o dos días.
Recomendamos una ingesta mínima de 1 litro según las recomendaciones entregadas.
La movilización es importante. Los pacientes pueden retirarse los apósitos y ducharse al día siguiente de la cirugía. Se aconseja pasear acompañado durante la primera semana postoperatoria. A partir de la segunda semana se podrá conducir, subir escaleras o levantar objetos livianos y realizar trabajos que no precisen esfuerzo físico. Probablemente será capaz de regresar a sus actividades habituales a partir de la tercera semana.
La presencia de fiebre, aparición de dolor abdominal importante, distensión, nauseas y vómitos persistentes, o salida de líquido o pus por alguna de las heridas, no es normal y debe contactar con su cirujano.